Las lentes de contacto son una alternativa genial a tus gafas pero hay que tener en cuenta ciertos aspectos.
El primero y fundamental es que las lentes de contacto deben ser adaptadas de manera individualizada a cada persona, es decir, teniendo cuenta todas las características anatómicas del usuario. Valores como el radio corneal, el diámetro corneal, el tipo de lágrima y la graduación son básicas para una adaptación perfecta. Piensa que todos los ojos no son iguales, como no todos los pies son iguales. El optometrista debe realizar las pruebas necesarias hasta encontrar las lentes de contacto que mejor se adapten a tus ojos, que te resulten cómodas y que te proporcionen una visión perfecta.
Además el uso que le quieras dar a tus lentes de contacto, más esporádico o diario, son de primordial interés para que los optometristas te asesoremos cual es tu lente de contacto ideal.
Una vez adaptadas tus lentes de contacto debes saber que hay una pautas que cumplir para un uso seguro. Te las detallamos ahora mismo:
- Lávate las manos con agua y jabón antes de manipular las lentes. En las manos se encuentran muchos gérmenes que pueden provocar infecciones leves o graves en tus ojos. La higiene es la principal necesidad en el uso de lentes y las lentes se deben manipular con las manos limpias y secas.
- Utiliza la solución de limpieza que te recomienda tu optometrista. Cada lente de contacto y cada usuario necesitan un tipo de solución de limpieza. Las necesidades de una lente de hidrogel no es la misma que un hidrogel de silicona, como no lo son los usuarios con alergias, con ojos sensibles, con lágrimas con muchos depósitos de proteínas. Huye de remedios caseros: los laboratorios fabrican líquidos que aportan la desinfección, lubricación e hidratación adecuada para las lentes de contacto. La desinfección de las lentes de contacto es la base de los líquidos de mantenimiento y los laboratorios incorporan los mejores productos para que las lentes queden desinfectadas sin afectar negativamente a las delicadas características de tus ojos. Déjate asesorar por los optometristas y cumple las normas de limpieza para disfrutar de unas lentes de contacto desinfectadas, frescas y seguras.
- Agua, la gran prohibida. En el agua, ya sea del grifo, embotellada, del mar o de la piscina, conviven ciertos patógenos que pueden crear infecciones serias en tus ojos al quedarse impregnados en el material de tus lentes de contacto. La gran enemiga es la Achantamoheba, un protozoo ameboide que causa queratitis graves, dolorosas e invalidantes. No te la juegues. Por ello no debes ducharte, nadar o ir a saunas con tus lentes de contacto colocadas. Si quieres nadar con lentes mejor elige unas diarias y retíralas enseguida al salir de la piscina. Y por supuesto no debes enjuagar tus lentes de contacto con agua, ni limpiar el portalentillas con agua. Cada bote de solución de limpieza incorpora un portalentillas nuevo y es para usarlos, deja que coleccionarlos en el cajón y desecha el usado al contenedor del reciclaje de plástico y estrena un portalentillas nuevo con cada nuevo bote de solución limpiadora. Que sabemos que hay coleccionistas de portalentillas ;)
- No estires las lentillas. Por favor, cumple con los reemplazos: las lentes de contacto mensuales son mensuales, es decir, las debes desechar a los 30 días de abrir el blister. Si alargas la reposición al final estarás usando una lente de contacto que ha perdido sus características y te pueden provocar problemas e incluso intolerancia a largo plazo. Y no, las diarias no están preparadas para ser guardadas en solución única. Siento decirte que usarlas unas horas, guardarlas en el portalentillas y usarlas otro día no es una buena idea porque no están diseñadas para tal menester y no toleran correctamente las soluciones.
Como ves la seguridad de las lentes de contacto depende tanto de los optometristas con una adaptación perfecta como de un uso responsable del usuario. Las lentes de contacto son una opción genial, que aporta libertad y en muchos casos una visión mucho más natural y cómoda que con gafas. No te lo pierdas y pregunta sin compromiso por la posibilidad de uso de tus lentes de contacto. En la actualidad hay opciones para todas las ametropías (miopía, hipermetropía, astigmatismo) y para presbicia.
Anímate y disfruta la vida.
Escribir comentario